Plato de cerámica llano artesanal, ideal para decoración de interiores y especialmente preparado para colgar en la pared. Esta pieza está elaborada con técnicas tradicionales, esmaltada manualmente y decorada a mano con pigmentos naturales, lo que garantiza un acabado único y de gran calidad. Cocido en horno eléctrico a 980 grados de temperatura, el plato es resistente y duradero, adecuado para mantener su belleza intacta con el paso del tiempo. Su decoración está inspirada en escenas de montería del siglo XVIII, destacando figuras de cazadores a caballo, que evocan el estilo de vida rural y la tradición cinegética de la época. Estos motivos históricos le confieren a la pieza un carácter distintivo, convirtiéndola en una excelente opción para quienes buscan incorporar elementos con alma y significado en la decoración de sus hogares. Cada plato es irrepetible, con ligeras variaciones fruto de su proceso artesanal, lo que garantiza exclusividad. Ideal para espacios con estética rústica, clásica o de inspiración histórica, aporta calidez, autenticidad y un fuerte vínculo con la cerámica tradicional española. Su superficie esmaltada facilita la limpieza y protege los pigmentos, asegurando su conservación a lo largo del tiempo. Perfecto para decorar salones, recibidores, pasillos o cualquier pared que necesite una pieza de impacto visual y valor artístico.